miércoles, 31 de julio de 2013

Ser o Tener

¿Ser o no ser?, esa era la cuestión. Una de las preguntas existenciales que más acompañaron a Erich Fromm en su andadura filosófica de los 90 fue, ¿Ser o tener?.

Seres humanos olvidan cada mañana lo que viene detrás de la palabra humanos, qué significa eso de "seres" y lo que conlleva vivir en esa inconsciencia. La invasión del tener sobre el ser, ha dejado de lado a la gente que "se siente preocupada" por la que "tiene problemas", es una sutileza del lenguaje que dice mucho. No es lo mismo ser padre que querer tener un hijo, la posesión y necesidad queda impregnada en este ejemplo que no es difícil de presenciar.

Hay mucho de insatisfactorio en el deseo del tener, cuando uno come una buena comida y se queda satisfecho, por mucho que le traigan un plato exactamente igual al ingerido no lo querrá. Metafóricamente hablando ¿qué se come para no alcanzar ese estado de satisfacción?, a mi modo de ver, al final todo radica en no estar disfrutando lo que se presenta, querer otra cosa a la que hay, te echa a patadas de un paraíso en vida.